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Me dijeron que venían de Jaén aunque su música parece salida de las mismas entrañas del infierno. Al menos esa impresión me llevé el sábado noche tras asistir al concierto de Guadalupe Plata en Gijón. Presentaban su disco homónimo después de haber ganado varios premios de música en directo como el XXIII Festival Lagarto de Jaén y recientemente el Circuito Joven Pop-Rock de Andalucía. Con estas y otras buenas referencias, si encima el concierto era gratis, no había excusa posible ni tenía sentido pensárselo dos veces para no ir al Dom Pedro.

Con una formación de trio el grupo está formado por Pedro de Dios a la guitarra y voz, Jimena a la batería y Paco Luis Martos al barreño (a modo de contrabajo). Curioso y original este instrumento hecho con una cuerda, un palo de escoba... ¡y un barreño! (de ahí su nombre). Así salieron a tocar su repertorio basado en temas propios principalmente. Durante poco más de una hora se emplearon a fondo para hacer gala de buen blues rocoso y más primitivo que una piedra. Su propuesta es simple pero a la vez sólida y electrizante. Las canciones ganan bastante en directo con respecto al disco, "I'd Rather be a Devil", "500 mujeres", "Veneno"... suenan a una especie de blues de las cavernas, a veces con alguna pincelada punk. Las letras posiblemente no sean su punto fuerte, lo mismo que la voz, pero esto queda en un segundo plano y poco parece importar porque transmiten su mensaje a través del impacto de su música.

Me sorprendió especialmente la pericia del batería Jimena, para mi el principal motor de este grupo, marcando siempre un ritmo muy potente a cada golpe, lo mismo con las baquetas que con unas maracas. Pero sus dos compañeros tampoco son mancos, Pedro de Dios sacó el máximo partido a sus guitarras bien con el slide, jugando con los acoples o incluso utilizándolas como instrumento de perscusión en momentos puntuales con los platos de la batería. Mientras, Luis Martos alternaba el barreño con el bajo según que canciones.

Sus influencias las tienen claras, e intentan transmitir el legado de los viejos bluesmen más salvajes. Tras una hora de concierto se guardaron un par de bises para el final, de los cuales uno de ellos fue "I Just Can´t Make It", muy buena y psicótica versión del gran Hound Dog Taylor. En resumen, buen concierto el de Guadalupe Plata, una banda con margen de mejora pero con un futuro prometedor. Desde luego que empiezan con buen pie. El mes que viene tienen pensado girar por los USA y desde aquí les deseamos toda la suerte del mundo. Si aún no los conoceis y quereis haceros una idea de como se las gastan en directo pinchad aquí.